Telescopio Espacial Hubble
Lanzado en 1990, el Telescopio Espacial Hubble es uno de los grandes logros de la humanidad. Han pasado 33 años desde su puesta en órbita y funciona casi a la perfección. Pero, poco a poco, se va desorbitando, y aunque el plan a futuro es hundirlo en el mar, algunas empresas como SpaceX proponen mantenerlo activo por más tiempo.
Este telescopio de la NASA y la ESA se encuentra a 593 kilómetros sobre el nivel del mar, pesando cerca de 11 toneladas, con una longitud de 13.2 metros y un diámetro de 4.2 metros.
Posee cuatro instrumentos para obtener imágenes y espectros, además de tres sensores de guiado fino. En todo el tiempo que lleva en el espacio, el Hubble recibió cinco misiones de servicio, incluso un rescate por parte de técnicos jubilados de la NASA.
El aporte del Hubble a la ciencia es inconmensurable, descubriendo indicios sobre la existencia de los agujeros negros, captando imágenes del cometa Shoemaker-Levy 9 y de las nebulosas del Águila, Keyhole y Ojo de gato, y las galaxias del Sombrero, Antennae y NGC 6302.
Pero, apartando el plan de derribarlo, ¿cuáles son las propuestas para mantenerlo activo?
De acuerdo con el portal Space, las empresas Momentus y Astroscale contactaron a la NASA para trabajar con el telescopio. Su objetivo es usar un cohete, acoplarse al telescopio y mover su órbita unos 50 kilómetros más arriba.
Posteriormente limpiarían los desechos orbitales en las cercanías del Hubble.
El gran problema de las Momentus y Astroscale es que requerirían de una importante inversión, y probablemente la NASA no tenga lo suficiente, en plena etapa de los viajes de Artemis.