Donald Trump
A nivel
mundial se han generado múltiples análisis y comentarios agridulces sobre
los resultados de los primeros 100 días del segundo gobierno del 47 presidente
norteamericano, Donald Trump, que se cumplieron el pasado miércoles (20 de
enero-30 de abril 2025).
El presidente Trump, graciosamente (¿?) celebró dicho acontecimiento subiendo
(él mismo) en su Truth Social una fotografía vestido de papa con esta
expresión: "Me gustaría ser papa. Esa sería mi opción número uno. Creo que
sería un gran papa. Nadie lo haría mejor que yo” ¿Megalomanía?
Esos dos acontecimientos (los primeros 100 días y dicha fotografía con la
insólita frase) fueron la principal causa que motivaron esta preocupante
reflexión: Después de esos controversiales primeros 100 días de su segundo
gobierno, ¿qué viene, presidente Trump? Veamos:
Como ningún
otro presidente norteamericano, en esos primeros 100 días, el presidente Trump,
con un estilo muy autoritario tipo repúblicas bananeras, estableció un
precedente histórico: Firmó 143 órdenes ejecutivas (decretos), 42
proclamaciones y 42 memorandos (la mayoría firmados delante de los
periodistas). Obviamente, todos al margen del Congreso.
Mediante esas controversiales disposiciones desató la guerra de los aranceles
contra gobiernos “amigos, neutrales y enemigos” y desde su poltrona
presidencial expresó: “ésta vez gobierno al país y al mundo”.
Mediante evaluaciones macroeconómicas y sus impactos, destacados economistas
(entre ellos varios Premio Nobel) y escuelas de Economía de
prestigiosas universidades norteamericanas, vaticinan que “la guerra de
los aranceles” induce a una delicada inflación combinada con recesión
(estanflación) en EE.UU.
Dicho sea de
paso, esa aguerrida embestida arancelaria, tanto por su indiscriminado
contenido como por su estrafalaria implementación mediática, los EE.UU. está
perdiendo la guerra ante China (supuesto principal enemigo).
El presidente Trump, con su histriónico accionar, olvida estos dos sabios
consejos: “quien mucho abarca poco aprieta” y “quien siembra vientos, cosechará
tempestades”, porque, simultáneamente con la generalizada guerra arancelaria,
el presidente Trump se abrió varios frentes de guerra con insultos, amenazas y
drásticas decisiones que afectan directamente a múltiples sectores internos y
externos. Observen este rosario de “golpeados” en estos primeros 100 días:
1.- Amenazas
y golpeos a más de 100 países, destacando los feroces ataques contra China,
Panamá. Canadá, Groenlandia, México, Unión Europea, Venezuela, 2.- Fracaso de
su promesa de detener la guerra Rusia-OTAN-Ucrania en “24 horas”. 3.- Apoyo
económico y en armas para estimular la masacre contra niños, mujeres,
ancianos y enfermos palestinos-Hamás en la Franja de Gaza. 4.- Supresión
de fondos a varias ONGs y programas sociales nacionales e internacionales, 5.-
Cierre de varios departamentos y cancelación de miles de empleados federales,
También, en
esos primeros 100 días: 6.- Desvinculación de organismos apéndices de la ONU.
7.-Amenazas, enfrentamientos y sanciones contra prestigiosas
universidades norteamericanas suspendiéndoles asignaciones financieras. 8.-
Fuertes enfrentamientos contra varios medios de comunicación y amenazas
contra la libertad de expresión. 9.- Confrontaciones e insubordinación
contra el poder judicial e irrespeto a la institucionalidad federal. 10.-
Dramáticos desplomes en varias ocasiones de las bolsas de Wall Street con
cuantiosas pérdidas multimillonarias. 11.- Ruptura unilateral de varios
contratos y convenios con instituciones internacionales y otros países.
Por razones que desconocemos, el presidente Trump, en estos 100 días, en
ningún momento ha valorado ni se ha referido al vertiginoso fortalecimiento
geopolítico de los países que se están aglutinando en el BRICS.
Contra R. Dominicana debemos hacer una seria y objetiva lectura de estas cuatro
perlas de acciones del presidente Trump en este período: 1.- Aumento de un 10 %
de los aranceles, lo cual es un duro golpe a nuestra economía. 2.- Subliminal
mensaje para apropiación exclusiva de los derechos para uso y explotación de
“nuestras tierras raras”. 3.- “Muy extraña indiferencia, ausencia y pasividad”
ante la grave crisis por la que atraviesa Haití.
Finalmente,
4.- Amenaza directa contra la autodeterminación y soberanía que se vislumbran
en las “elocuentes declaraciones” de la asignada nueva embajadora: “En RD vamos
a enfrentar el narcotráfico y la drogadicción y a detener los negocios y
presencia de China. ¡Qué barbaridad, no guardan las formas!
Las cosechas del presidente Trump en estos primeros 100 días son: Dispersión y
lucha contra el mundo, incluso distanciamiento de países amigos, rápido
descenso en su popularidad, incluso entre sus fanáticos seguidores e
importantes líderes del Partido Republicano y peligroso debilitamiento del
dólar a nivel internacional.
Por todo lo acontecido en estos primeros 100 días del segundo gobierno del
presidente 47 de EE.UU. nuestra exhortación a reflexionar seriamente sobre el
significado de esta pregunta: ¿Quo vadis, presidente Trump?